El control de la salud infantil es fundamental para detectar a tiempo cualquier problema que no sea evidente a simple vista. Las visitas regulares al pediatra permiten seguir el desarrollo adecuado de tu hijo y prevenir posibles complicaciones. Aquí te dejamos una guía de las visitas más importantes durante los primeros años de vida:
A la semana de vida:
Es crucial una primera consulta para revisar la adaptación del bebé fuera del útero y asegurarse de que todo esté en orden.
A los 1, 3, 6, 9, 12 ,18, 24, meses:
Durante estos primeros meses y años, tu bebé estará pasando por muchos cambios. El pediatra evaluará su crecimiento, desarrollo y le realizará las vacunas correspondientes.
A los 2 años:
En esta consulta se siguen monitoreando aspectos clave del desarrollo motor y cognitivo, así como su crecimiento físico.
Luego cada 6 meses hasta los 5 años:
A medida que tu hijo crece, las visitas al pediatra se hacen más espaciadas, pero siguen siendo esenciales para asegurar que su salud continúe en óptimas condiciones.
A partir de los 5 años:
Después de los 5 años, la visita al pediatra debería ser al menos una vez al año, hasta los 18 años. Aunque no siempre haya señales de alarma, es importante mantener un seguimiento médico para garantizar su bienestar general.
¿Por qué son importantes estas visitas?
Muchas condiciones de salud en los niños no presentan síntomas evidentes hasta que ya están avanzadas. Las consultas periódicas con el pediatra permiten detectar y prevenir problemas que no siempre son visibles en casa.

